MENSAJE HUMANISTA

Cualquier sugerencia, Contactanos : juventudhumanista-monsefu@hotmail.com

IDEOLOGIA Y DOCTRINA

PARTIDO HUMANISTA PERUANO
COMITÉ EJECUTIVO NACIONAL
IDEOLOGIA Y DOCTRINA
NUESTRO HUMANISMO ES FILOSOFIA ABIERTA
1. El humanismo como significado amplio de la palabra, da lugar a las más variadas interpretaciones y, en consecuencia, a confusión y malentendido. Como humanismo, muchas filosofías han afirmado saber qué o quién es el ser humano y cuál es el camino correcto para la realización de las capacidades que le son más específicas. Vale decir, toda filosofía que se ha declarado humanista ha propuesto una concepción de naturaleza o esencia humana, de la que se han derivado una serie de consecuencias en el campo político y práctico.

2. El término humanista se utiliza con un segundo significado, más preciso, en cuanto resulta claramente definido en términos históricos. Se utiliza para designar al movimiento cultural que produjo, entre los siglos XIV y XV, una radical transformación de la civilización occidental, poniendo fin al Medioevo cristiano. Esta transformación se extendió a toda Europa casi como una explosión, y se le conoce como el “Renacimiento”. A partir de ahí toda la literatura del humanismo se concentra en exaltar al hombre y reafirmar su dignidad en oposición a la desvalorización operada por el Medioevo cristiano. No obstante la diversidad de los temas, todos apuntan a un objetivo común: recobrar la fe en la creatividad del hombre, en su capacidad de transformar el mundo y construir su propio destino. El término humanismo, en pleno siglo XXI, se utiliza comúnmente para indicar toda tendencia de pensamiento que afirme en lo central, el valor, la dignidad del ser humano, o interés básico por la vida del ser humano en el mundo.

3. La filosofía humanista peruana que adscribe el Partido Humanista Peruano se centra en reflexionar para el bienestar de los seres humanos, en la relación de éste con la naturaleza y su equilibrio; en su relación con la sociedad a través del poder, la economía, la paz y todo aquello que signifique la política, como forma superior de relación entre seres humanos a través del diálogo y la concertación. Nuestro humanismo se basa en considerar hombre al ser humano como el centro y el fin de la acción humana, de la sociedad y la política. No concibe al hombre como fin en sí mismo, aislado, sino en relación con la naturaleza, la sociedad, la historia, la política.

4. La filosofía humanista peruana no es una corriente contemplativa y/ o compasiva, sino es una fuerza de acción y solidaridad, como un imperativo de nuestro tiempo. Por ello el hombre debe ser:

Todo, libertad y razón y, como consecuencia de ser libertad y razón, es un ser de fines, no de medios.
Está llamado a realizar fines, por lo tanto, se opone con rotundidad al determinismo y al economicismo que todo lo ve lucha de clases.
Su práctica exige la utopía de considerar al hombre portador de valores universales de carácter general como la libertad, la dignidad, la igualdad.
El salto del ser al deber ser precisa de una toma de posición ética, requiere un compromiso moral, con una visión humanista de la política, que establece la política como una actividad al servicio de la realización de los valores intrínsecos en el ser humano.
El humanismo peruano, por ello, no es una corriente ideológica ni doctrina cerrada, se adscribe como filosofía abierta, que tiene como principales características el pensamiento sobre el hombre, su libertad, su independencia y bienestar.

5. El humanismo que reconocemos como ideología y doctrina es una decisión de amor y respeto, reconociéndonos y aceptándonos como somos a fin de concertar para reconstruir el estado y reinventar la nación. Para ello proponemos en toda acción personal y colectiva tres convicciones básicas:

1. Que los seres humanos poseen dignidad intrínseca, es decir, que nada hay más valioso que un ser humano sobre la tierra;

2. Que la libertad es el bien más preciado en la vida de una persona humana; que la búsqueda de la felicidad propia no solamente no debe colisionar con la búsqueda similar que hagan otras personas.

3. Que la suma de esfuerzos puede garantizar mejores resultados que la confrontación o la enemistad.


6. El primero de estos principios o convicciones tiene una fortaleza política inmensa. De hecho, descarta toda opción como el comunismo o el neo-liberalismo, que consideran aceptables los sacrificios de generaciones enteras de seres humanos en aras de felicidades futuras o de promesas de prosperidad a mediano o largo plazo. Si cada ser humano es valioso en sí mismo, entonces, como decía el filósofo Kant, ninguno puede ser sacrificado por otro, ninguno puede ser usado como instrumento en beneficio de otro. Otra manera de decir esto mismo es que el humanismo es incompatible con cualquier limitación a la plena vigencia y al pleno respeto a los derechos humanos.


7. El segundo principio invalida toda forma de organización política que no sea absolutamente democrática y que no esté basada en el derecho de cada persona de decidir sobre su propia vida. Nada que limite la libertad de las personas es aceptable. El único curso posible de la historia es, en consecuencia, el que garantice una ampliación de los márgenes de libertad, autonomía y autodeterminación de las personas.

8. El tercer principio es el que consagra la solidaridad, la concertación y la cooperación como las bases mismas del tejido social y de las interacciones entre individuos y grupos de individuos. El humanismo apuesta por la concertación, antes que por la competencia o el enfrentamiento como la vía más eficaz para obtener resultados positivos en cualquier circunstancia

9. Humanismo y política: Para nuestro humanismo la política es democracia plena y gobierno democrático, es decir, participación, transparencia y el permanente respeto por la auténtica representación de los ciudadanos. El fortalecimiento de la política debe ser el reconocimiento de que la democracia no es un instrumento al servicio de otros objetivos, sino que la democracia es un fin en sí mismo. Por eso, el primer objetivo de esta propuesta debe ser el incremento de la participación política porque es el elemento esencial por el que se fortalece el sistema democrático, y también los sectores de ese sistema que son los partidos.

El humanismo debe fortalecer las garantías para la expresión del pluralismo político y social. El pluralismo no puede ser utilizado como elemento de ventaja cuando se está en el poder para no permitir la posibilidad de que otro sea poder. Las sociedades democráticas y abiertas se basan, en que existen grupos diferentes, con diferentes directrices y con concepciones diferentes.

La política tiene que garantizar que esas opiniones diferentes, que dichas concepciones diferentes, puedan convertirse algún día en la solución política para la mayoría. Un nuevo acuerdo sobre la política tiene que ser sobre la transparencia y como actividad pública, para el común de los ciudadanos. Por

tanto, tiene que hacerse en todos los espacios, a la luz de todos y con el conocimiento de todos.

El Partido Humanista Peruano puede mantener relaciones con otros partidos e instituciones sociales y políticas del mundo que adhieren a los fundamentos doctrinarios del humanismo, que declaramos asumir como ideología y doctrina.

Documento aprobado en sesión del CEN del PHP del 31 Agosto 2009

0 comentarios: